Una nueva pasión: los mandalas. No sabía que me fascinaban tanto hasta ayer.
Todo comenzó buscando imágenes de mariposas (una vez más las mariposas). Entre las cientos de fotos y las decenas de dibujos más o menos felices de mis insectos favoritos, apareció un mandala con una mariposa dentro. De inmediato cliqueé sobre él y di con más y más mandalas. Lo mejor del caso es que eran mandalas listos para imprimir y colorear a gusto, sea desde la misma PC o con las viejas y queridas pinturitas como hice yo ayer y como pienso hacer hoy mismo y todas las veces que pueda.
Luego, me enteré de que son usados principalmente para meditar y que el ejercicio de dibujarlos y/o pintarlos es un excelente modo de "desestressarse", algo que tanta falta nos hace en momentos como los actuales. Son también pequeñas obras de arte en sí mismos y están presentes, esto me pareció lo más notable, en todas o casi todas las culturas humanas, incluso las más distantes entre sí o las menos "evolucionadas" (pongo comillas aquí ya que ¿menos evolucionadas con respecto a qué, a cuáles, a qué parámetros?). También me entero de que fue Carl Gustav Jung uno de los primeros en estudiar a fondo el simbolismo de los mandalas y en descubrir en él uno de sus tantos arquetipos (de ahí que existan en todas las culturales, diríamos).
Pero mandala había sido siempre para mí una palabra netamente cortazariana, puesto que es muy mentada en Rayuela. Ahora ha adquirido un nuevo sentido para mí, que celebro profundamente. Si les interesa la etimología, mandala en sánscrito quiere decir 'círculo' pero también 'inicio' si no leí mal ayer. Algunos recomiendan comenzar a pintarlos desde afuera hacia adentro, simbolizando el viaje desde el afuera hacia el adentro de uno mismo al encuentro de nuestro "centro en calma", mientras que otros preconizan exactamente lo contrario. Opino que lo primero es lo más estimulante.
Les dejo aquí un mandala oriental (símbolo del metal) y aquí encontrarán mandalas para bajar, imprimir y colorear mientras que aquí encontrarán fabulosos diseños para tatuajes, remeras, cuadernos, fondos de pantalla o decorar cualquier otra cosa que se les ocurra. Por último, aquí, mandalas hechos por un artista (Paul Heussestamm) cuyos colores me tienen alucinada desde que lo descubrí.
¡Corran a imprimir y pintar los suyos, qué esperan! ¡No saben lo que se pierden! Yo misma, termino de postear adecuadamente esto y me voy a pintar mis mandalas.
1 comentario:
AP siempre va a sorprendernos con algo. Posiblemente, su incesante búsqueda de respuestas (que nunca toman esa forma, sino la de desvíos), provenga de su inmenso amor por la literatura y de su arraigada costumbre a utilizar la mente más que el corazón.
Obviamente, formada como intelectual, hace honor a ello y nos suele regalar, tanto sesudos análisis literarios, como divertimentos o rarezas que rastrea en la WEB con meticulosidad de investigadora.
Hoy nos ofrece, a la carta, el interesante mundo de los mándalas (o mandalas) y, no sin profundizar un poco desde lo teórico, su singular poder lúdico.
Esto me llevó a web-ear un poco y también descubrí (o debería decir me enteré), sobre cuestiones de las cuales no tenía mucha o ni la menor idea.
Algunas veces hemos chateado con AP acerca de las incógnitas de lo oriental y su mágico misticismo. Pues tal cosa, no existe; es una simple posición cultural, adoptada a fuerza de siglos de concepciones hegemónicas.
Valga como referencia introductoria, la complejidad matemática que encontré por acá, sobre cómo otro tipo de figuras similares: los yantra, figuras similares para el hinduismo, en tanto los mandalas son más (aparentemente) budistas. Sea una u otra, en ambos casos, es de suponer que su creación no responde solamente a pretensiones del ámbito lúdico. El único obstáculo de la página en cuestión (y para mi mismo) es que está en inglés.
También sobre los yantras, encontré esta, página que nos explica e ilustra la relación entre estos diseños o figuras y las concepciones espirituales del hinduismo, con unas simpáticas figuras animadas que apoyan la comprensión del texto.
Quizá darse una vueltita por esas páginas nos ayude a empezar a entender que, cuestiones tan en boga y vendidas por supuestos expertos, son en realidad producto de saberes milenarios que ciertos desvíos hegemónicos, no nos permiten ni siquiera asomarnos a chusmear, si no es bajo la piel de una mercancía (Kamasutra, sexo tántrico, en diferentes precios y envases, etc).
Para no pudrir más con esta cháchara y, ya que AP nos habló del padre de la escuela de Psicología analítica, Carl Gustav Jung (para empezar se puede chusmear acá (sepan disculpar aquellos entendidos que critican a Wikipedia sin contemplar que habemos quienes no nos las sabemos todas), me quedo pensando en 2 ideas por él expuestas:
El «símbolo de Cristo» tiene suma importancia para la psicología, porque es tal vez, junto con la figura de Buddha, el símbolo más desarrollado y diferenciado del sí-mismo.
Sin la vivencia de los opuestos no existe experiencia de la totalidad y, por ende, tampoco un acceso interior a las figuras sagradas..
Ay ay ay! , eternos opuestos prestados de Hegel a Marx que seguirán determinando, en su lucha, la existencia de un poder hegemónico.
Quizá algún día encontremos entonces respuestas, pero respuestas activas, si nos dedicamos a vivir nuestras propias vidas de manera mandálica. (pensamientos de poetas).
Publicar un comentario